EL post navideño

Bueno debí iniciar este post varios días antes, pero en ves de eso estoy aquí la madrugada del veinticinco de diciembre apenas comenzando a escribir.

Como muchos de mis conocidos notaran, este año no llego a mi, lo que mucho llaman el “espíritu navideño”, no se si fue por la navidad del año pasado o por que ahora no había con quien celebrar, aunque seguramente fueron ambos factores.

Hace algunos meses escribí “el 14 de febrero lo disfrutan los solteros” (vinculo al post) y según veo las cosas, la navidad la disfrutan los dueños de centros comerciales y no digo los empleados de las tiendas, por que ellos deben trabajar toda la noche un día supuestamente de fiesta, en cambio los dueños pueden tranquilamente ir a sus casas a celebrar, ganando millones por minuto sin mover un dedo.

Y esto pasa, si el magnate es católico o no, por que sigue siendo un día de fiesta y lo puede tomar como mejor le convenga. En cambio el resto de las personas deben trabajar o gastar todo su aguinaldo en: comida, adornos, cubiertos, luces, más adornos, viajes (para ir con los parientes), más comida y bebida; pagando por ello precios exorbitantes y esperando horas en las filas del súper.

Quizá algunos opinen que todo esto vale la pena por tener una bella convivencia en familia, aunque sea una vez al año, y celebrar el (supuesto) nacimiento del icono más importante de su religión.

Pero todos sabemos por experiencia que esto NO ES CIERTO!. De entrada están todas las horas desperdiciadas en la cocina, luego, la llegada de parientes incómodos o personas que uno no soporta, pero por la fecha debe aguantar y algunos listillos usan esta fecha de pretexto para acomodarse una peda, y del nacimiento del nazareno, muy pocos se acuerdan.

Esto es muy parecido a lo que pasa en año nuevo (tema que tratare en un siguiente post…. Espero)

Vale vale , no crean que soy un amargado, también me gusta la navidad (un poco) sobretodo por que es la época del año donde puedo tomar sidra y comer espagueti sin parar y por….. Rayos, solo por eso.

Bueno, este año donde precisamente este día no tengo Internet ni celular, me quede incomunicado (mi agenda esta en mi cel) y no pude mandar o recibir felicitaciones navideñas. Recibí una llamada telefónica, de alguien que no esperaba, por que a ella no le gusta la navidad (quizá un poco). Caray esa sola llamada me hizo el día.

Los parientes incómodos, las horas extra de trabajo, el espagueti y la sidra, todo comenzó a tener sentido, de algún modo todo cuadraba, comenzaba a valer la pena, todo gracias a la llamada de mi buena amiga Inuki san ^^.

Y comprobé una idea que tenia desde hace tiempo. La navidad no son los regalos, no son las luces ni el arbolito, no es la cena ni los invitados. La navidad, como la mayoría de las celebraciones, son las personas y los sentimientos de afecto entre ellas. Aun en medio de la nada, una navidad puede ser calida, si se tiene familia y buenos amigos con quien celebrarla y eso es lo único que importa.

Es una verdadera pena que la gente (y esa quimera mediática llamada Santa clos) lo hayan olvidado